Que es homeostasis en psicologia
Homeostasis psicología motivación
Los artículos de Verywell Mind son revisados por médicos certificados y profesionales de la salud mental. Los revisores médicos confirman que el contenido es exhaustivo y preciso, y que refleja las últimas investigaciones basadas en la evidencia. El contenido se revisa antes de su publicación y tras actualizaciones sustanciales. Más información.
El contenido de Verywell Mind es rigurosamente revisado por un equipo de verificadores de hechos cualificados y experimentados. Los verificadores de hechos revisan los artículos para comprobar su exactitud, relevancia y actualidad. Nos basamos en las fuentes más actuales y reputadas, que se citan en el texto y se enumeran al final de cada artículo. El contenido se comprueba una vez editado y antes de su publicación. Más información.
La homeostasis se refiere a la necesidad del organismo de alcanzar y mantener un cierto estado de equilibrio. El término fue acuñado por primera vez por un fisiólogo llamado Walter Cannon en 1926. Más concretamente, la homeostasis es la tendencia del organismo a controlar y mantener los estados internos, como la temperatura y el azúcar en sangre, en niveles bastante constantes y estables.
Psicología de los incentivos
El ser humano busca el equilibrio en su vida. Cuando las cosas están desordenadas o desequilibradas, tienden a causar problemas. Esto es especialmente cierto en lo que respecta a nuestro estado interno o bienestar. La homeostasis se refiere a esta tendencia a mantener un estado interno equilibrado o constante que sea óptimo para el funcionamiento. Por ejemplo, usted tiene una temperatura corporal específica "equilibrada" o "normal" que es de aproximadamente 98,6 grados. Cuando hay un problema con el funcionamiento interno de su cuerpo, esta temperatura puede aumentar, señalando un desequilibrio. Como resultado, su cuerpo intenta resolver el problema y restablecer la homeostasis; su temperatura corporal normal.
Homeostasis fisiológica y psicológica
En biología, la homeostasis (también homeostasis británica) (/hɒmɪə(ʊ)ˈsteɪsɪs/) es el estado de condiciones internas, físicas y químicas estables que mantienen los sistemas vivos[1]. Se trata de la condición de funcionamiento óptimo para el organismo e incluye muchas variables, como la temperatura corporal y el equilibrio de líquidos, que se mantienen dentro de ciertos límites preestablecidos (rango homeostático). Otras variables son el pH del líquido extracelular, las concentraciones de iones de sodio, potasio y calcio, así como el nivel de azúcar en sangre, y deben regularse a pesar de los cambios en el entorno, la dieta o el nivel de actividad. Cada una de estas variables está controlada por uno o varios reguladores o mecanismos homeostáticos, que en conjunto mantienen la vida.
La homeostasis se produce por una resistencia natural al cambio cuando ya se está en condiciones óptimas,[2] y el equilibrio se mantiene gracias a muchos mecanismos reguladores: se cree que es la motivación central de toda acción orgánica. Todos los mecanismos de control homeostático tienen al menos tres componentes interdependientes para la variable regulada: un receptor, un centro de control y un efector[3]. El receptor es el componente sensor que vigila y responde a los cambios en el entorno, ya sea externo o interno. Los receptores incluyen termorreceptores y mecanorreceptores. Los centros de control incluyen el centro respiratorio y el sistema renina-angiotensina. Un efector es el objetivo sobre el que se actúa para devolver el cambio al estado normal. A nivel celular, los efectores incluyen receptores nucleares que provocan cambios en la expresión génica mediante la regulación al alza o a la baja y actúan en mecanismos de retroalimentación negativa. Un ejemplo de ello es el control de los ácidos biliares en el hígado[4].
Ejemplos de homeostasis en psicología
El ejemplo más conocido de homeostasis es la temperatura corporal. El cuerpo humano quiere mantenerse a una temperatura estable (de media, 98,6 grados Fahrenheit). Si tiene demasiado calor o frío, el cuerpo reacciona para volver a su temperatura preferida.
Por ejemplo, si tiene demasiado calor, el sistema nervioso envía señales al cerebro. El cerebro quiere que estas señales cesen, así que reaccionará haciendo que el cuerpo sude o aumentando la circulación sanguínea en la piel. Lo hará hasta que la temperatura corporal vuelva a un nivel aceptable y las señales cesen. Esto se conoce como sistema de respuesta de retroalimentación negativa (opuesta).
La homeostasis es una tendencia o preferencia de un sistema, como el deseo del cuerpo de mantener una temperatura estable. El cuerpo no necesita que le digan o le obliguen a realizar la homeostasis. Lo hace automáticamente. Casi siempre, un fallo del organismo para mantener la homeostasis conduce a la muerte.
¿Por qué es importante la homeostasis? Los primeros registros del término homeostasis datan de 1925. Combina la raíz homeo-, que significa "similar", y la palabra stasis, que significa "equilibrio". El término homeostasis fue acuñado por el fisiólogo Walter Bradford Cannon, que observó que los cuerpos de los animales cambiaban sus procesos internos como reacción al estrés. Cannon también acuñó el término lucha o huida en referencia a este tipo de reacciones corporales.